El domingo, junto con unos compañeros del Master&Commander (así lo llamaba una amiga mía) visioné “La Maldición” una película de miedo.
La historia es graciosa porque desde hacía mucho tiempo mis compis, querían prepararme una encerrona para que la viéramos. Les dolía que constantemente me riera de las películas del miedo. Ellos pensaban que lo que hacía era esconderme detrás de una coraza a lo Juan sin miedo. Finalmente me invitaron y accedí. No había coraza, pero sí un implacable Saber Estar.
La película trata sobre Japón, un niño demonio, Buffy cazavampiros , la madre del niño demonio y una vieja que parece salida del hotel “El resplandor”. La acción se desarrolla en el Japón actual. Aparecen japoneses y americanos a partes iguales, los americanos casi siempre mueren y los japoneses, salvo una pobre desdichada y los malos que murieron en el pasado, quedan indemnes.
Al inicio, buen comienzo, drama y tensión 50%-50%, luego remonta con historias cotidianas y vuelve a la tensión y los sustos. El HP del niño demonio se lleva la palma. Maldito niño y malditos ruiditos. No se sabe muy bien porqué en la película introducen varias llamadas telefónicas. Las utilizan como hilo conductor para copiar la estructura de LOST (Rest In Peace) de flashbacks, esa ha sido mi deducción. El nombre del niño demonio intimida, Yoshio se llama el bendito.
Sé que existen los amantes de las películas de miedo y la verdad es que no les comprendo. Las películas por lo general son malas, sangrientas o con guionistas a los que sólo les faltaba dar un manual de instrucciones:
Ejemplos:
-Siempre que hay un lugar oscuro, un actor secundario acude…¿Para qué? me preguntó yo.
-Si el timbre suena inesperadamente, abren la puerta….¿Quién coño iba a ser?
-Si hay una escalera que lleva a ningún sitio, suben por ella…¿Qué puede haber en una escalera oculta que no lleva a ningún sitio?
-Si te venden la casa encima de un antiguo cementerio indio………..no la compres. ¿Alguien lo haría?
Reconozco que el puntito miedo, mantita y chavala que te pase el brazo por encima cuando estás cagado, tiene su aquel. También el momento bowl+palomitas volando es gracioso, sobre todo, si no se te caen a ti. Recordar ese momento en que el entraste en una casa vacía, que era la tuya, en la que vivías o viviste durante 27 años….crujido de maderas, portazo y sombras que se mueven. Palo de escoba en mano, mucho ruido y pulsación de todas las luces al mismo tiempo eran la solución. Alguna vez me ha ocurrido, lo reconozco….o algunas veces.
Conclusión: si no hay chica/chico en el pack, acto de bravura que demostrar, ninguna otra opción disponible o protas que estén de buen ver, las película de miedo para su p… m… (Perdón) para quién las quiera.
Por último una pregunta me asalta por qué en todas las películas de miedo hay un gato negro que maulla como un tigre.
La historia es graciosa porque desde hacía mucho tiempo mis compis, querían prepararme una encerrona para que la viéramos. Les dolía que constantemente me riera de las películas del miedo. Ellos pensaban que lo que hacía era esconderme detrás de una coraza a lo Juan sin miedo. Finalmente me invitaron y accedí. No había coraza, pero sí un implacable Saber Estar.
La película trata sobre Japón, un niño demonio, Buffy cazavampiros , la madre del niño demonio y una vieja que parece salida del hotel “El resplandor”. La acción se desarrolla en el Japón actual. Aparecen japoneses y americanos a partes iguales, los americanos casi siempre mueren y los japoneses, salvo una pobre desdichada y los malos que murieron en el pasado, quedan indemnes.
Al inicio, buen comienzo, drama y tensión 50%-50%, luego remonta con historias cotidianas y vuelve a la tensión y los sustos. El HP del niño demonio se lleva la palma. Maldito niño y malditos ruiditos. No se sabe muy bien porqué en la película introducen varias llamadas telefónicas. Las utilizan como hilo conductor para copiar la estructura de LOST (Rest In Peace) de flashbacks, esa ha sido mi deducción. El nombre del niño demonio intimida, Yoshio se llama el bendito.
Sé que existen los amantes de las películas de miedo y la verdad es que no les comprendo. Las películas por lo general son malas, sangrientas o con guionistas a los que sólo les faltaba dar un manual de instrucciones:
Ejemplos:
-Siempre que hay un lugar oscuro, un actor secundario acude…¿Para qué? me preguntó yo.
-Si el timbre suena inesperadamente, abren la puerta….¿Quién coño iba a ser?
-Si hay una escalera que lleva a ningún sitio, suben por ella…¿Qué puede haber en una escalera oculta que no lleva a ningún sitio?
-Si te venden la casa encima de un antiguo cementerio indio………..no la compres. ¿Alguien lo haría?
Reconozco que el puntito miedo, mantita y chavala que te pase el brazo por encima cuando estás cagado, tiene su aquel. También el momento bowl+palomitas volando es gracioso, sobre todo, si no se te caen a ti. Recordar ese momento en que el entraste en una casa vacía, que era la tuya, en la que vivías o viviste durante 27 años….crujido de maderas, portazo y sombras que se mueven. Palo de escoba en mano, mucho ruido y pulsación de todas las luces al mismo tiempo eran la solución. Alguna vez me ha ocurrido, lo reconozco….o algunas veces.
Conclusión: si no hay chica/chico en el pack, acto de bravura que demostrar, ninguna otra opción disponible o protas que estén de buen ver, las película de miedo para su p… m… (Perdón) para quién las quiera.
Por último una pregunta me asalta por qué en todas las películas de miedo hay un gato negro que maulla como un tigre.
Brillante comentario... y mejor película. Lo malo no es sólo que aparezca el gato negro maullando, sino que no sólo maulla el gato...
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